El creciente desarrollo urbano de las últimas décadas ha traído consigo diversos problemas ambientales. Varios de ellos son claramente perceptibles, como la contaminación atmosférica o la cada vez más compleja gestión y disposición final de residuos sólidos. Sin embargo, también existen problemas latentes no percibidos por la sociedad, que tienen efectos directos en el bienestar, como por ejemplo el ruido ambiental.
La contaminación acústica tiene un campo de acción localizado, es invisible y su energía puede disiparse con facilidad. No obstante, la conciencia social sobre las consecuencias de exposiciones prolongadas a niveles de ruido elevados es casi nula, debido a esa invisibilidad.
Aunque en los entornos urbanos existen diversas fuentes de ruido, el tráfico vehicular es la fuente que mayor impacto tiene en las ciudades. Esto se debe al constante crecimiento del parque automotor y a la cercanía de calles transitadas a las viviendas y lugares de trabajo.
La exposición prolongada a esta fuente de ruido tiene efectos nocivos en la salud de las personas. Estos efectos pueden variar desde la sensación de molestia, problemas auditivos y cognitivos hasta trastornos en el sistema cardiovascular.
Impacto socio-económico del ruido de tráfico en Quito
El costo social de estos efectos se cuantifica estimando los años de vida sana que se pierden producto de estas enfermedades y afectaciones. Por ejemplo, en 2011 la Organización Mundial de la Salud (OMS) estimó que en Europa se pierden 22.000 años de vida sana por efecto de un trastorno auditivo llamado tinitus y 56.000 años debido a hipertensión.
Para estimar el costo del ruido de tráfico existen varias metodologías, siendo las más utilizadas la valoración contingente y la valoración hedónica.
En la valoración contingente, el costo del ruido se extrae de lo que las personas declaran que están dispuestas a pagar para reducir sus efectos. Mientras que en la valoración hedónica, el costo del ruido se estima a partir de la variación en el precio del mercado inmobiliario.
Un aspecto común en ambas metodologías está relacionado con los niveles de exposición a la contaminación acústica. Esto comúnmente se obtiene con instrumentos de medición de ruido o con mapas acústicos. Los resultados de estas valoraciones tienen una fuerte correlación con características demográficas, culturales y socioeconómicas.
El ruido en Quito
Entre 2015 y 2016 se desarrolló una investigación para estimar el costo del ruido de tráfico en Quito. Se utilizó la metodología de valoración contingente, cuyos resultados han sido publicados en dos artículos científicos.
Para ello se encuestó a 600 hogares en 20 distintos sectores de la ciudad. Le obtuvieron datos sobre:
- la experiencia con el ruido de tráfico en el hogar,
- la percepción de molestia producida por este agente de contaminación,
- las características demográficas y socioeconómicas de los participantes, y
- la disposición a pagar una tasa anual que permita financiar un plan de acción, enfocado en evaluar y mitigar el ruido que genera el tráfico rodado.
Cada una de las encuestas realizadas fue comparada con el nivel de exposición al ruido en la fachada de la vivienda del participante. Para estimar el nivel de ruido al que está expuesta una edificación, se desarrolló un modelo que utiliza:
- información geográfica de calles,
- flujo y composición vehicular,
- velocidad de circulación (facilitada por los conteos automáticos realizados por la Secretaría de Movilidad del Municipio de Quito).
Resultados de la valoración
Los datos recolectados en el estudio permitieron desarrollar un análisis econométrico que determinó la influencia de cada una de las variables utilizadas. Además, a través de este análisis se pudo configurar un perfil ciudadano para estimar la valoración económica asignada al ruido.
Adicionalmente, se utilizó una técnica de inteligencia artificial denominada Redes Neuronales Artificiales (RNA). Esto permitió resolver problemas como la subjetividad de las personas encuestadas, así como aumentar la precisión de la capacidad predictiva de la valoración en 85%.
Los resultados del modelo de inteligencia artificial indican que las variables más influyentes en la valoración económica del ruido de tráfico vehicular son:
- la molestia nocturna producida por la exposición al ruido,
- el estrato socioeconómico, y
- el nivel de exposición a la contaminación acústica.
Por otra parte, las variables menos significativas en la valoración están asociadas con la percepción de los efectos del ruido.
Cuánto cuesta el ruido de tráfico en Quito?
El valor promedio de la disposición a pagar para financiar planes de acción fue de $ 15,7 anuales por hogar. Así, considerando la cantidad de hogares que residen en la zona urbana de la ciudad, se podría recaudar $ 8,8 millones para financiar este tipo de medidas.
Estos resultados permiten a la autoridad ambiental conocer el costo que la población de la ciudad asocia al problema de la contaminación acústica. Con esto se podrían diseñar e implementar políticas públicas de gestión de ruido ambiental, estableciendo objetivos para desarrollar acciones enfocadas en minimizar el impacto acústico en la salud de la ciudadanía. Además de maximizar el beneficio de las acciones a desarrollar.
En conclusión, esta investigación presenta la evaluación económica de un aspecto relevante para la ciudad. El ruido requiere en el mediano plazo una intervención precisa enfocada en mitigar el impacto social y en la salud de la población.
